Han pasado más de 7 meses desde que el sistema educativo ha representado todo un reto para el gobierno mexicano, ya que para algunos la educación online paso de ser una opción a una realidad.
El inicio de la pandemia por COVID-19 ha provocado una revolución en la educación, desde los niveles básicos hasta el mundo universitario. Algunos expertos han indagado sobre cómo será la educación después de superar la crisis y han asegurado que no volverá a ser de la forma tradicional, especialmente para los alumnos universitarios.
Son dos los principales retos que ha enfrentado la educación en el país hoy en día:
- Desigualdades sociales-educativas. Casi la mitad de la población se encuentra en un estado de vulnerabilidad, lo que ha condicionado las nuevas formas de llevar la educación.
- ¿Cómo llegar a todos los hogares? No todos han tenido las condiciones para poder trabajar a través de plataformas y los programas educativos que ha propuesto el Sistema Educativo Mexicano, y los que las tienen se han visto en la dificultad de saber utilizarlos.
Esta situación ha llevado a que las autoridades evalúen qué tan viable puede ser la educación en línea entre la población más joven.
Los alumnos universitarios podrían considerarse como los primeros en experimentar el cambio de la educación tradicional a la digital después de la pandemia. Aunque aun enfrentan algunas barreras, con un buen desarrollo de estrategias y mejorar la infraestructura, la población universitaria puede tener una experiencia satisfactoria dentro del e-learning. Y, esto representaría un puente para los niveles básicos.
Lo que sí te podemos decir, es que la pandemia ha adelantado procesos que se veían lejanos y podrán ser implementados después de la crisis, por ejemplo:
- El incremento de la educación en línea.
- Aumento de los recursos digitales en niveles básicos.
- La formación online y la oferta de programas universitarios crecerá.
- Menos movilidad internacional entre los estudiantes.
One more thing… una encuesta realizada por EY México a 1,100 estudiantes de nivel superior arrojó que el 60% prefiere las clases presenciales, ya que brindan un aprendizaje de mayor calidad.